Alza de las tasas de interés bancario para depósitos

El reciente anuncio del alza de las tasas de interés bancario para depósitos de los ahorristas, en todas las modalidades de ahorro, es una buena noticia, pues esta tasa actualmente es ínfima. Al contrario, las tasas activas que los bancos cobran por cualquier préstamo es muy superior a las llamadas tasas de interés pasivas, que se aplican a cualquier tipo de cuentas de ahorro o plazo fijo. Esta gran brecha entre lo que paga el banco a los que confían sus depósitos en estas entidades y lo que cobran por préstamos, es algo insostenible y refleja la gran voracidad por obtener utilidades mediante los prestamos. Es decir con el argumento de que los ahorros están bien custodiados, los bancos no pagan casi nada como resultado de tener montos de dinero de sus clientes en sus diferentes circuitos de flujo de capitales. El dinero casi nunca permanece en sus bóvedas. El dinero de todos los ahorristas, es la materia prima con la cual el bando despliega sus actividades financieras y con esta masa monetaria, logra obtener pingues ganancias. Es cierto que las entidades bancarias tienen que acatar una serie de regulaciones y controles, a través de la Superintendencia de Banca y Seguros, pero también es cierto que el manejo de las tasas de interés en cuanto a sus montos obedece a una bien calculada estrategia de maximizar sus utilidades. Otro argumento que escuchamos de los funcionarios de los diferentes bancos, es que la tasa de interés que pagan los bancos es la resultante del libre juego del mercado. Este argumento no es tan cierto, pues los ahorristas no tienen la capacidad ni la organización para hacer prevalecer sus derechos, mediante la tan famosa ley de la oferta y la demanda. Es por eso que en todos los países, las entidades supervisoras definen las tasas de interés, de acuerdo a criterios más técnicos y que están relacionados con la economía de un país. Pero por ejemplo, en Estados Unidos, cuando la FED, determina un alza de las tasas de interés, las entidades bancarias norteamericanas, inmediatamente acatan este incremento y no arguyen, como en nuestro país, que el alza se debe dar de acuerdo a los requerimientos del mercado. Si eso fuera cierto, las tasas activas que cobran los bancos, en el Perú, serian mucho menores a lo que usualmente exigen los bancos a los prestatarios. Por eso esperamos, que esta anunciada subida de las tasas de interés pasivas, se haga efectiva inmediatamente, para beneficio de miles de pequeños ahorristas, que tienen sus depósitos en las diferentes entidades bancarias de nuestro país. Es que en nuestro entorno, no existen una verdadera cultura del crédito y del ahorro, para que los que integran esta población, en forma organizada, exijan un tratamiento más justo por los depósitos que tienen en los bancos y otras entidades financieras. Si esto se concretara, las tasas de interés pasivas, es decir lo que deben ganar los depósitos de ahorro y a plazo fijo, serian mayores y muy próximos a las tasas activas que estas organizaciones cobran por los préstamos. Estos préstamos solo son efectivos cuando existen una serie de garantías. Si una potencial prestatario no demuestra solvencia, no es sujeto de crédito. Por eso es muy cierto que el banco solo presta al que tiene dinero. Por Manuel J. Villanueva