miércoles, 9 de febrero de 2011

Por una democracia socio ambiental

Quizás el ex presidente brasileño Lula, dejo ese cargo con un índice de aprobación de más del 80%. Esto se debió, a que Lula, saco de la pobreza a decenas de millones de brasileños. Pero este logro, se hizo a expensas del medio ambiente. Las obras de infraestructura, tales como la tan mentada carretera interoceánica, que une a Brasil con nuestro país, las grandes hidroeléctricas y una serie de cultivos agrícolas, han provocado un verdadero desastre ecológico, en la región amazónica. Esta zona, es considerada por muchos expertos, como el pulmón de oxigeno más importante para los 7000 millones de seres humanos que existimos sobre nuestro planeta. Es decir las medidas efectistas, como las que realizo Lula, a pesar de su positivo impacto social, han destruido grandes áreas, pletóricas de biodiversidad. Es que en pleno siglo XXI, nuestros políticos, no toman en cuenta con seriedad la conservación del medio ambiente. A pesar de las continuas denuncias de expertos en el tema medioambiental, donde se ha demostrado que está en vigencia el calentamiento global, no existen hasta ahora una verdadera concientización para paliar los efectos de este fenómeno producido por el hombre. En nuestro país, el deshielo de nuestros bellos nevados, por el calentamiento global, es una triste realidad. Se calcula que nos quedaremos sin nevados dentro de 20 años. Este fenómeno, agudizara, el abastecimiento de agua dulce para las grandes ciudades costeras principalmente y también el regadío de muchas aéreas agrícolas. La visión de avasallar a la naturaleza para aprovechar sus recursos, tiene su sustrato en que el ser humano no se cree parte de la naturaleza. Esta es una visión antropocéntrica, que resulta muy perjudicial para nuestra supervivencia. El hombre, es parte de la naturaleza, como cualquier especie animal y su existencia, depende de ella y no al revés. Además la falta de una verdadera voluntad política para proteger nuestro medio ambiente, ocasiona una serie de desastres naturales, tales como deslizamientos de tierra, inundaciones, que afectan la seguridad de miles de personas. Por eso es necesario que el tema medioambiental, sea el eje principal de todo programa político, como la finalidad de crear una democracia socio ambiental, que garantice la sostenibilidad de todos los habitantes del país y la sostenibilidad de los recursos naturales. Estos recursos deben ser explotados con un criterio de largo plazo, pensando en las generaciones futuras. Estamos en un periodo muy crucial para la supervivencia de nuestra especie en nuestro planeta. Esta realidad, es comparable con la época en que se extinguieron los dinosaurios, hace 65 millones de años. Este fenómeno, fue causado por el impacto de dos meteoritos sobre la superficie de la tierra. Pero ahora, la crisis ecológica que estamos experimentando no se debe a algo natural sino a consecuencia de las constantes agresiones hechas por el hombre contra el medio ambiente. Se dice que estas violaciones, se agudi9zaron a fines del siglo XVIII, cuando se inicio la revolución industrial. La aplicación de la maquina a vapor descubierta por John Watts, potencio exponencialmente, la capacidad del hombre, para producir una serie de bienes y servicios, pero contaminando el medio ambiente. El principal combustible usado por ese entonces fue el carbón de piedra y luego el petróleo, que junto con otros productos industriales ha provocado, desde ese entonces, la agresión permanente a nuestros ecosistemas. Esperamos que nuestros políticos, tomen en cuenta este tema, a fin de asegurar nuestra seguridad y bienestar común.
Por Manuel J. Villanueva