El plan anti crisis

Recién el pasado lunes 8 el Dr. García se animo a presentar un plan contra la recesión que afecta ya a todo el mundo. En estas horas, Japón y la Unión Europea, han confirmado la seriedad de la crisis financiera que tiene para largo y golpeara a todas las economías del mundo. Esto demuestra que de nada valen las palabras, por más elaboradas que sean, para frenar esta hecatombe financiera, productiva y comercial. Lo que nos toca es que el gobierno actúe con seriedad y toque los sectores que mas pueden ser golpeados por este torbellino económico. Es decir los que pueden padecer más esta crisis, son los sectores de bajos recursos, es decir la población que está en el ámbito de la pobreza y extrema pobreza. Para tal fin, no solo se debe invertir en obras de infraestructura, tales como carreteras, puentes, puertos y aeropuertos, sino que tiene que potenciarse el apoyo a las pequeñas y medianas empresas y también al sector agrario, dedicado a producir alimentos para el consumo interno. Estos sectores siempre han sido los que menos han recibido apoyo efectivo de parte del gobierno, a pesar que son los que generan más puestos de trabajo. Además el sector agrario familiar, compuesto por millones de peruanos, abastece con el 70% de nuestra demanda alimentaria. El arroz, la papa, el maíz, la quinua, las verduras y frutas que consumimos diariamente, provienen de estas estructuras agrarias, llamadas minifundios. Por eso es perentorio que el gobierno les de toda su atención y no solo a los grandes agro exportadores.
Otro rubro importante, es prevenir la descapitalización de los fondos de pensiones administradas por las AFPs, cuyos afiliados son más de 3 millones de peruanos. El fuerte y continuado descenso de las bolsas de valores a nivel mundial, incluida la de Lima, es una clarinada de alerta, para que el gobierno garantice la intangibilidad de los fondos de los afiliados. Creemos que llego la hora, para reestructurar este importante sector, si se quiere dar confianza y seguridad a un gran sector de la población. Hay que tener en cuenta que las pérdidas de las AFPs, en un año, ascienden a más de 5 mil millones de dólares y que las comisiones son muy altas. En este aspecto se da la paradoja que los afiliados pagan mensualmente sus comisiones, para perder, lo cual no solo es ilógico sino inmoral, amén de las sustanciosas dietas de los directores que lideran estas empresas.
La crisis financiera, nos va a golpear y para eso es necesario mirar hacia adentro, para asegurar nuestra calidad de vida y minimizar sus efectos, que van a durar no 18 meses sino muchos años, según lo pronosticado por el electo presidente norteamericano Barack Obama.
Por Manuel J. Villanueva