Caos controlado, geopolítica y Siria

Desde fines de la década de los 40 del siglo pasado, el cercano oriente ha sido una zona de alta volatilidad e inestabilidad. La abundancia de hidrocarburos, la presencia de Israel como nación y los conflictos inducidos entre shiitas y sunitas, son razones más que suficientes para que esta región este siempre en el caos y la angustia para la mayoría de sus habitantes. Dentro de este contexto, los recientes cambios de gobiernos en Túnez, Libia, Egipto y la guerra civil en Siria, más que singulares procesos políticos y económicos de cada país, son un enfrentamiento geopolítico entre los Estados Unidos, Europa y Rusia por tener muchos intereses encontrados en esta estratégica región del mundo. Los cambios de gobierno en los citados países árabes, producto de las manifestaciones masivas de sus habitantes, que constituyo la llamada Primavera Arabe, menguaron la capacidad geopolítica de Egipto, Libia y Siria. Los norteamericanos han tratado por todos los medios de hegemonizar la zona, por lo que intervinieron militarmente en Irak y el apoyo logístico a la OTAN para derrocar a Muammar Gadaffi. Pero esta crisis de estabilidad ha permitido a Iran, que no es un país árabe, aprovecharse de estas crisis políticas en su propio beneficio. Por eso los norteamericanos tratan de intervenir militarmente en Iran, con el pretexto del desarrollo iraní de armas atómicas. Los iraníes, apoyan en este momento a Siria que se desangra en una cruel guerra civil y además da apoyo logístico a la guerrilla chiita Hezbola del Líbano. Estas fuerzas, que apoyan a los palestinos, vencieron militarmente al poderoso ejército de Israel cuando invadieron Líbano y ahora dan apoyo armado al gobierno sirio de Bashar al Assad. Este gobernante árabe, no es bien visto por muchos países del cercano oriente como son Arabia Saudita, Qatar y Turquía. En este país que era un ejemplo de desarrollo económico, cuyo logro más resaltante fue duplicar el PBI turco ha habido grandes manifestaciones contra su presidente Recep Tayyip Erdogan, que se iniciaron en el parque Gezi, por tratar de formar un gobierno con mucha injerencia religiosa y por el creciente desempleo de su población, especialmente jóvenes. Su política de no tener problemas con sus vecinos ha caído en el desprestigio porque Erdogan, t rata de inmiscuirse en la guerra civil siria, que está desangrando a este país. Es decir el gobierno turco ha caído en el desprestigio entre sus colegas árabes e iraníes. El alejamiento de parte de Turquía del gobierno sirio, ha sido una de los peores errores de Erdogan, porque al Assad, todavía se mantiene en el poder de Siria y tiene el apoyo de Rusia, China e Irán. Tambien el uso de armas químicas en Siria, al parecer no fue utilizado por las fuerzas militares de ese país, sino por los rebeldes, que cuentan con el apoyo de Estados Unidos, Europa e Israel. Este hecho configura un grave atentado contra los derechos humanos, que apuntan a los líderes rebeldes sirios. Otro país que quiere tener liderazgo en la región es Qatar, potencia económica gracias a sus inmensas reservas de gas a pesar de ser muy pequeño tanto en territorio como en población. Este país cuenta con una red mundial de telecomunicaciones Al Jazeera, que está catalogada como una de las mejores cadenas de noticias del mundo. Su crecimiento ha hecho que recientemente Al Jazeera, inaugure una estación muy moderna de televisión en los Estados Unidos. Qatar jugó un papel muy importante en la llamada Primavera Arabe, porque influyo en la caída de los gobiernos de Túnez, Libia y Egipto. Qatar tiene un régimen conservador y apoyo la llegada al poder de los Hermanos Musulmanes en Túnez, Egipto y Marruecos. Sin embargo los regímenes religiosos en estos países enfrentan serios problemas a tal punto que Mohamed Morsi que ascendió al poder de Egipto como candidato de los Hermanos Musulmanes, fue depuesto después de regir Egipto por un lapso de un año. Las multitudinarias manifestaciones en Egipto, influyeron en los militares para dar un golpe de estado, cuyo desenlace puede ser una guerra civil como la que esta desangrando Siria. Todos estos movimientos, según muchos estrategas demuestra una perdida de la hegemonía de los Estados Unidos, en esta región del cercano oriente. Este vacio que dejan los norteamericanos tiene que ser ocupado por otras potencias que aspirar a influir en el cercano oriente. Puede ser Rusia, China o Irán, las naciones que surjan como potencias dirimentes entre estos países. Pero no hay que olvidar que Israel, que es el único país no árabe ni musulmán tiene que cuidar su estabilidad y permanencia entre este mar de árabes que lo rodean. Por eso Israel, trata de intervenir militarmente en Irán cuyo gobierno es un enemigo jurado de los israelíes, a tal punto que los líderes iraníes, no reconocen al gobierno de Israel y más bien tratan de aplastarlos militarmente. Según muchos estrategas, en esta situación caótica del medio oriente, son los Estados Unidos los que han perdido su hegemonía en esta región. También pronostican que continuara la crónica beligerancia sin que haya ni vencedores ni vencidos y esta realidad puede duran muchos años más. Serán los vendedores de armas los únicos beneficiados de esta situación, como suelo ocurrir en todas las guerras de este mundo. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional Blog:www.majevic.blogspot.com