Vietnam la china del siglo XXI

La república socialista vietnamita, ubicada en el sudeste asiático, con una población de 81 millones de habitantes, está cobrando nuevamente notoriedad. Si hace mas de 45 años, Vietnam, era noticia cotidiana, por la guerra librada contra las fuerzas norteamericanas, que dejaron en su suelo 50 mil soldados de ese país muertos en combate, ahora hay otra invasión, pero de hombres de negocios. A pesar que todavía está fresco en el recuerdo esta frustrante guerra de invasión hecha por los norteamericanos, la oferta vietnamita de buenas condiciones para invertir, deja de lado este sentimiento de frustración que experimentan los americanos por una guerra que fallaron. Estas condiciones se basan en la estabilidad política y la disciplina laboral que es producto de su régimen socialista. Ahora, se trata de multimillonarias inversiones, que los estadounidenses y otros capitalistas, efectúan en Vietnam, para producir en forma industrial una serie de productos que van desde detergentes, textiles a componentes electrónicos y otros bienes con alto valor agregado. Es que este país, también ofrece muchas ventajas a los inversionistas, preferentemente una mano de obra calificada, de muy bajos salarios, como era China hace 20 años. Por este motivo, numerosas plantas enteras que antes estaban localizadas en China, se están moviendo a Vietnam. El dragón rojo, ahora no es tan competitivo en costos industriales, porque su mano de obra ha subido. Sin embargo tanto China como Vietnam, hasta la fecha, tienen precios muy bajos para sus productos que elaboran, pero de calidad no tan buena como los productos que se fabrican en Japón. El talón de Aquiles de la calidad es el gran lastre que arrastran los productos chinos y vietnamitas. Pero la estrategia que siguen los grandes inversionistas en Vietnam, es casi igual a la empleada en China desde finales de la década de los 70 del siglo pasado. Es decir buscan mano de obra calificada pero barata en costos. Vietnam, como república socialista, que ha sufrido grandes pérdidas humanas y materiales desde que se independizo de Francia en los años 50 del siglo XX, supo incidir en la educación y preparación de cuadros de obreros, técnicos e ingenieros calificados, de igual forma que lo hizo en su oportunidad China. Esta gran masa de trabajadores calificados vietnamitas, solo estaban aguardando la apertura de su economía, para demostrar sus capacidades profesionales. Las grandes ciudades vietnamitas tales como Hanói o ciudad Ho Chi Minh, están prácticamente invadidas por extranjeros, que están instalando en esas locaciones, grandes instalaciones fabriles. El volumen de las inversiones, que es cuantioso, también ha provocado una fiebre de construcciones de numerosos edificios que se destinaran a oficinas y viviendas para las personas, que estén en las planillas de estas empresas transnacionales. Por este motivo, dentro de poco la marca Made in China, cederá el paso a la marca Made in Vietnam. Este cambio de matriz industrial, tendrá muchos efectos colaterales en el comercio internacional, que podría agudizar la crisis económica por la que atraviesa el mundo. China, de esta forma, perdería su liderazgo de ser la mega fábrica mundial para ceder parte de este poderío a Vietnam. Este país, tiene el potencial necesario para ubicarse como un nuevo dragón de la economía mundial. Vietnam, es mucho más grande en territorio y población que Corea, Taiwán, Singapur o Hong Kong, que son los llamados tigres asiáticos. Por eso las connotaciones comerciales, económicas y políticas que producirá Vietnam, es para tenerlo presente a f in de manejarlo como una oportunidad de hacer mejores negocios que favorezcan a nuestra economía. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional