Amenaza para nuestra salud

Los antibióticos, específicamente la penicilina, que fue un gran descubrimiento de Alexander Fleming, hace más de 60 años, ahora se están volviendo inocuos, por el descontrol en su consumo. El consumo sin freno de estos fármacos ha credo grandes resistencias en muchas bacterias y microbios que producen una serie de enfermedades en el ser humano. Según un reciente informe de la OMS, estamos atravesando una época de grandes amenazas para la salud pública mundial, que podria producir centenares de miles de muertes. Es decir hay un grave riesgo para todos nosotros si tuviéramos una gripe, infecciones urinarias o una herida, porque no habra antibióticos eficaces para curarnos. Antes era muy sencillo salvar estas enfermedades con el uso de antibióticos, que tenian una gran capacidad de aniquilar muchos microbios y bacterias. Pero durante estas décadas, el afán comercial, hizo que las farmacias expendieran estos productos en forma libre. Es decir se propendió a la automedicación de antibióticos, sin consulta medica ni la respectiva receta que avalara la compra de estos fármacos. La automedicación ha producido que muchos pacientes tomen grandes cantidades de antibióticos, pensando que de este modo sus enfermedades infecciosas se sanarían mas rápido. Pero lo que ha producido este consumo sin control, es que la gran mayoría de antibióticos no sirvan para curar las infecciones, porque tanto las bacterias como los microbios que causan estas dolencias, se han vuelto resistentes a este tipo de tratamientos. Lamentablemente, la libre venta de antibióticos es a nivel mundial y por eso la OMS, hace un llamado para que estemos preparados para este nuevo escenario, donde solo valdría la prevención de adquirir este tipo de males. Por ejemplo, la tuberculosis, que ataca a cientos de miles de personas a nivel mundial, es considerada ya una enfermedad mortal, porque hasta la fecha no existen antibióticos que la puedan curar. Igual sucede con otras infecciones como el tétano, las enfermedades de transmisión sexual y las infecciones gástricas. También cualquier herida que nos hagamos en nuestro cuerpo y que se infecte, puede ser una laceración incurable, que nos obligaría a hacer permanentemente la asepsia que estos casos requieren. Lo que antes era fácil de curar ahora se ha vuelto una misión imposible por la resistencia de los microbios a la mayor parte de antibióticos. Estamos inermes ante la amenaza de los microbios y bacterias por nuestra culpa. Según la OMS, el mundo se dirige hacia una nueva era de posantibioticos, en la que las enfermedades comunes tales como los resfriados, las diarreas y heridas menores, no serán eficazmente tratadas y podrían ocasionar la muerte de los afectados con estas dolencias. Sin embargo los laboratorios científicos, están trabajando para crear nuevas familias de antibióticos que puedan vencer a las enfermedades infecciosas que tienen mucha incidencia en la población mundial. Pero, la situación a la que hemos llegado, por el abuso del consumo de los antibióticos tradicionales, nos debe servir de lección, para que siempre hagamos uso de los futuros fármacos con responsabilidad y con asistencia y recomendación de un medico. En este aspecto, también las farmacias deben aumentar sus controles para no vender estos fármacos sin receta médica. Estamos obligados por estas circunstancias a ser más prudentes en el uso de todo tipo de fármacos y siempre se debe acudir a la ayuda médica que es la única forma de minimizar los riesgos del exagerado consumo de antibióticos y otros fármacos. Además la gran demanda de antibióticos ha generado la producción de una serie de fármacos sin el debido control de calidad, lo cual empeora más la situación que atravesamos. En este aspecto son también responsables las autoridades gubernamentales, encargadas de dar el pase a los productos farmacéuticos para que se vendan en el mercado. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional, Blog: www.majevic.blogspot.com