Vida alienígena inteligente

El famoso físico y cosmólogo británico Stephen Hawking, acaba de anunciar que es casi seguro que existan seres extraterrestres con inteligencia perfectamente racional, pero que los humanos debemos evitar un posible contacto. Haciendo eco a esta afirmación del prestigioso hombre de ciencia británico, otro físico norteamericano, Brian Cox, afirma por su lado, que hay vida inteligente incluso en nuestro sistema solar. Posiblemente hayan seres que estén habitando la luna Europa, del planeta Júpiter de nuestro sistema solar, pero bajo un grueso manto de hielo y que una nueva generación de cohetes interplanetarios, podrán arrojar más luces, próximamente, sobre la posibilidad de vida en el planeta Marte. Es que los seres humanos, estamos ante la gran incógnita de si nuestra especie es la única y solitaria muestra de vida inteligente, en el Universo. Por eso desde épocas pasadas, el hombre a tenido la curiosidad de buscar seres inteligentes en otros planetas. Existe mucha literatura de ciencia ficción que tratan de mostrar a los lectores, la existencia de vida alienígena. Podemos citar a escritores de la talla de Julio Verne o H. G. Wells. Este último escribió una obra titulada la Guerra de los Mundos, que fue propalada, en 1939 por radio, al público norteamericano, por un famoso actor de cine Orson Welles. Fue tanto el realismo de esta novela dramatizada, que los oyentes de ese entonces entraron en pánico ante la posibilidad de la presencia de los extraterrestres, que eran mucho más inteligentes, ambiciosos y con ansias de poder y con mejor tecnología que la nuestra. Nuestra inferioridad manifiesta en ese drama, puede repetirse en estos tiempos, de acuerdo con Stephen Hawking. Por eso este físico, nos recomienda evitar todo contacto con estos seres, pues las consecuencias pueden ser devastadoras para todos nosotros. Hawking, hace una comparación con el descubrimiento de América por Cristóbal Colon. Este acontecimiento, fue muy negativo para los nativos del nuevo continente. En el descubrimiento de América, casi se extinguieron los seres oriundos de estas tierras y también se perdió gran parte de su bagaje cultural y casi se extermino su flora y fauna. Esta realidad, según Hawking, se podría repetir con nosotros si nos contactáramos eventualmente con los alienígenas, que podrían ser los nómadas del universo, en busca de un planeta que conquistar y colonizar. Según la lógica de Stephen Hawking, es matemáticamente, correcto pensar en la existencia de seres perfectamente racionales. Pero esta cualidad, es potencialmente negativa para nuestra especie, pues hay que ver solamente lo que ocurre entre nosotros mismos, para deducir, lo que ocurriría con una especie alienígena inteligente, llena de ambiciones y de afán de conquista. Sin embargo el hombre en tiempos recientes, ha estado buscando hacer contactos con seres alienígenas inteligentes. En los años 1972 y 1973, las sondas espaciales norteamericanas Pioneer 10 y 11, llevaron al espacio placas de un hombre y una mujer desnudos y algunos símbolos, que mostraban la posición de la tierra y del Sol en nuestra galaxia. Luego la NASA, envió al espacio las sondas Voyager 1 y 2, lanzadas en 1977, llevando un disco de oro con grabaciones de sonidos e imágenes de la tierra. Recientemente, en el año 2008, los norteamericanos enviaron al espacio profundo, mediante un haz de rayos laser, una bella canción de los Beatles titulada “Across the Universe”, como un mensaje de paz para todo alienígena y cuyo posible contacto seria en el año 2439, en la región Polaris, también conocida como la Estrella Norte. Es decir de acuerdo a estas informaciones, la humanidad, tiene que estar muy bien preparada moralmente, pues de nada vale enviar al espacio mensajes de paz y amistad sino estos buenas intenciones, no las cumplimos entre nosotros, tal como lo afirma Hawking, en su última y provocadora afirmación, que se tiene que tener en cuenta, ya que proviene del más prestigioso y lucido hombre de ciencias vivo, tal como es considerado Stephen Hawking, dentro de la comunidad científica mundial.
Por Manuel J. Villanueva