Las AFPS y la solidaridad

La reciente crisis de la deuda norteamericana, podría haber afectado seriamente las inversiones de nuestro sistema privado de pensiones, que tienen gran parte de los fondos pensionables en bonos norteamericanos, si no se hubiera elevado el techo del endeudamiento estadounidense. Esta crisis, debe servir para que dicho sistema pensionario, tome las previsiones del caso a fin de asegurar el pago a los actuales y futuros pensionistas. No solo se debe invertir mayoritariamente en bonos norteamericanos sino buscar otras monedas fuertes tales con el yuan chino, para asegurar mejor este capital que pertenecer a una gran cantidad de peruanos. Este gran negocio, que administra los fondos de los pensionistas, tiene que ampliar su misión empresarial, para darle un sesgo más solidario, pues se trata del futuro y la seguridad de seres humanos, de la tercera edad. No estamos hablando de inversiones privadas en sectores productivos, tales como la minería, la agroindustria o la gastronomía, sino en la administración y aseguramiento de millones de peruanos que confían en este sistema. Por eso sería necesario, que por ejemplo, las AFPS, brinden otros servicios gratuitos a sus afiliados, como seguros para el tratamiento de enfermedades tales como el cáncer, la depresión y otras que ya son comunes entre los adultos mayores. Se sabe que las ganancias de este llamado negocio, son muy altas y superan a la rentabilidad que obtienen, por ejemplo, las inversiones mineras. Esto servicios adicionales, se pueden realizar a través de la creación de un fondo de solidaridad para los pensionistas que reciben el equivalente de menos de 500 nuevos soles mensuales. También este fondo debería servir para que todos los pensionistas que reciben menos de esta cantidad, consigan un aumento que eleve sus pensiones mensuales a 750 nuevos soles. Muchos pensionistas, que han sufrido por largos años las trabas burocráticas de la ONP, para conseguir sus exiguas pensiones, deben tener un mejor trato de parte de las AFPS. Estas demoras, se deben en muchos casos a la falta de seriedad de las grandes y medianas empresas que a pesar de haber hecho los descuentos mensuales respectivos a cada trabajador, eludían declararlos ante el respectivo ente el llamado Sistema Nacional de Pensiones. Esta irresponsabilidad de estas empresas ha repercutido los ingresos de cientos de miles de pensionistas. A pesar que este realidad no está directamente ligada a la gestión del sistema privado de pensiones, el gesto de solidaridad, de estos hacia los más necesitados daría un rostro más humano a la gestión de fondos de los pensionistas. Este gesto proactivo sería una forma innovadora de gestión empresarial, que serviría de ejemplo para otros sistemas. Se sabe que los multimillonarios fondos de pensiones, son muy rentables y las utilidades, que son producto de estos fondos, no solo deberían servir para los grandes consorcios que gestionan esta actividad sino también para las personas que por una serie de razones solo reciben exiguas cantidades mensuales. El llamado sistema privado de pensiones, no debe esperar que esta iniciativa parta del gobierno, sino que se deben adelantar, como un gran gesto de solidaridad que traería más tranquilidad a miles de hogares y dotaría de mayor liquidez a nuestra economía, pues los pensionistas actuales con menguados ingresos, tendrían mayores posibilidades de consumir bienes y servicios para hacer muy dinámica a toda nuestra economía.
Por Manuel J. Villanueva
Ingeniero