jueves, 21 de julio de 2016

El candidato republicano Donald Trump

Acaba de ser nominado como candidato a la presidencia de EEUU, Donald Trump. Este hecho demuestra que también en el gran país del norte, hay una seria crisis política y una peor ausencia de verdaderos líderes políticos. De acuerdo a su comportamiento que Trump ha tenido en estos meses de campaña, se puede colegir que su discurso, frontal y a veces brutal, apunta a la recuperación de la supremacía blanca, que de acuerdo a las proyecciones demográficas es cada día menor en ese país. En los próximos 30 años, los blancos serán minoría, teniendo más peso poblacional, los habitantes latinos y afroamericanos, que serán la nueva mayoría de los EEUU. Su eslogan de campaña “Take our country back” que en castellano quiere decir, “recuperemos nuestra patria” apela al llamado sueño americano, dirigido principalmente a los electores blancos, donde muchas personas hicieron fortuna y nombradía. Es decir hicieron realidad el llamado sueño americano. Pero Trump, desde el punto de vista de las ahora minorías, critica la constante inmigración de mexicanos, centroamericanos y sudamericanos y ha ofrecido cerrar la frontera sur de su país, para impedir este flujo migratorio. Su discurso xenófobo, es deleznable, porque se olvida que los EEUU es un país de inmigrantes, incluyéndolo. Trump, desciende en segunda generación de inmigrantes escoceses. Quizás desde este punto de vista, solo los nativos norteamericanos conformadas por una serie de tribus, como los navajos, sioux o apaches, podrían decir que son los verdaderos norteamericanos. Muchos expertos creen, que Trump, tiene un discurso político disparatado y populista de derecha, que podría poner en apuros a su país, en la eventualidad que gane las próximas elecciones de noviembre a su rival demócrata Hillary Clinton. A diferencia de Trump, la Clinton, tiene una verdadera carrera política, pues ha ocupado cargos públicos de responsabilidad, como ser Secretaria de Estado o congresista. Su esposo Bill Clinton, fue dos veces presidente de su país. Todas estas relaciones políticas sustentan mejor sus ambiciones de llegar a ser la primera presidente de EEUU. Pero Trump, es calificado como un personaje voluntarista y excéntrico. Un verdadero outsider de la política, que basa su ascenso en sus declaraciones y posturas populistas, que encienden el ánimo patriota de muchos ciudadanos blancos preferentemente. Hasta la fecha este multimillonario, que basa su fortuna en el negocio inmobiliario, no ha ocupado ningún cargo de responsabilidad política. En las elecciones primarias de su partido, compitió, contra políticos de carrera y actuales congresistas de ancestros hispanos como Ted Cruz o Marco Rubio, ambos de 45 años de edad a diferencia de Trump que tiene 70 años. Toda la maquinaria política, de Trump, está bien aceitada con sumas millonarias que ha invertido en campañas publicitarias y en la promoción de su imagen a través de casi todos los medios. Esta profusión propagandística, parece que ha jugado un papel preponderante en su nominación como candidato presidencial. Después de las agotadoras primarias los partidos tradicionales de EEUU, han designado como sus candidatos a la demócrata Hillary Clinton y a Donald Trump por el partido republicano. Ambos personajes dirimirán la presidencia de este país en las próximas elecciones generales del próximo mes de Noviembre. Los sondeos de opinión, dan una ligera ventaja a la candidata demócrata, pero, hay una fuerte corriente que se opone a su elección, porque creen que es el continuismo del gobierno del actual presidente demócrata Barack Obama. Trump, es un furibundo crítico de las políticas de Obama, relacionadas principalmente con el medio ambiente y la atención de la salud pública. Por ejemplo en una reciente reunión con ejecutivos de las grandes corporaciones mineras y de hidrocarburos de ese país, Trump, ha ofrecido desregular todo el andamiaje de control ambiental actual, que apunta a la conservación del medio ambiente. Trump, quiere que haya multi millonarias inversiones en la explotación de esquistos bituminosos, shale gas, carbon y minerales de todo tipo. Es decir quiere convertir a su país, en un escenario dantesco, porque niega que el calentamiento global sea causado efectivamente por estas operaciones extractivistas. Este temperamento de Trump, esconde en su personalidad a un potencial dictador. Cree que su voluntarismo será suficiente para encarar las complejas relaciones mundiales, que atraviesan por una época de crisis, guerra, terrorismo, violencia e inestabilidad a lo ancho y largo de nuestro planeta. Su falta de tacto político, puede ocasionar serios problemas a la paz mundial. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional Blog: www.majevic.blogspot.com

1 comentario:

julcafer dijo...

En verdad, es preocupante la aceptación que está logrando este millonario excéntrico, exacerbando los sentimientos racistas y anhelos desmesurados de los inversionistas. Es claro que su éxito político se sostiene en base a sus declaraciones efectistas e insostenibles en el tiempo. ¡Dios nos libre de caer bajo su influjo!