lunes, 13 de junio de 2016

Consecuencias de las últimas elecciones generales

Terminado el conteo de los votos de la segunda vuelta, donde han dado como ganador a PPK, por estrecho margen, ahora es momento de analizar las posibles consecuencias que deja este prolongado proceso electoral. En primer término, han surgido caras nuevas en la arena política con una gran proyección en el futuro mediato. Estas son, la izquierdista Verónica Mendoza y Julio Guzmán, que no se lo podría etiquetar a que espectro político pertenece, hasta ahora. El caso de la Mendoza, es muy elocuente, pues a pesar de que hizo una campaña muy franciscana en cuanto a inversión de fondos, alcanzo un holgado tercer puesto en la primera elección. Esta candidata no tuvo mucha propaganda electoral, hasta el punto que no uso la televisión en ningún momento. Sin embargo fue víctima de un aluvion mediático y guerra sucia, para “bajarla” en su ascendente proyección para llegar al segundo lugar en la primera vuelta electoral. Sin embargo esta campaña negativa no afecto a la líder izquierdista. Sus gastos de campaña, son los más bajos, en comparación a otros candidatos, como Keiko Fujimori o Cesar Acuña. Estos políticos tuvieron gastaron millones de soles en sus respectivas campañas, porque usaron en gran magnitud todos los medios de comunicación, pintaron muchas paredes en todo el país, además repartieron todo tipo de regalos, dinero y otras dadivas a la ciudadanía, para captar sus votos. Pero también esas elecciones han demostrado que si un candidato quiere tener éxito electoral, debe usar continuamente las redes sociales, tales como el twitter o Facebook. El caso más resaltante de este empleo, es Julio Guzmán, quien tuvo a su alrededor un grupo de personas, que hicieron la difusión de su figura a través de Internet. Otro aspecto clave del uso de las redes sociales, es la formación de colectivos, formados mayoritariamente por jóvenes con edades que fluctúan entre los 18 a 30 años, que con este auxilio electrónico, han convocado a grandes multitudes en Lima y otras ciudades del país, para manifestar su protesta, como es el caso del colectivo “ keiko no va”. Esta fortaleza que tiene su base en la juventud, va a jugar un rol preponderante en los próximos comicios electorales, que se avecinan. También, existe una gran demanda popular por un verdadero recambio de líderes en todo el espectro político. Es decir que la derrota de Keiko Fujimori, aunque joven de edad, tiene los resabios de la herencia política añeja, que está influenciada por su padre, pero ha sido rechazada en las ultima elecciones por más del 75% de la población, si tenemos en cuenta los 5 millones de personas que no acudieron a votar. Asimismo, esta contienda, demuestra que muchos líderes veteranos, han llegado a su fin dentro de la práctica política. Nos referimos a Lourdes Flores Nano del PPC y a Alan García, del Apra. Ambos políticos han sido derrotados contundentemente en este reciente proceso electoral. El casi 5% conseguido por su alianza, es un magro resultado, que demuestra su poca aceptación entre el electorado. A pesar de la millonaria campaña propagandista de esta alianza y con García, como un verdadero actor protagónico y usando vestimenta y bailes juveniles, la juventud precisamente es la que le dio la espalda. Estos hechos confirman que todas o casi todas las agrupaciones políticas, experimentan una verdadera crisis de sobrevivencia y la demanda de sus partidarios, es apostar por el recambio de sus dirigentes en un ambiente netamente democrático. Ya el tiempo de los proverbiales líderes que ellos solos ganaban una elección, se terminó. Ahora y en los próximos años, el electorado estará conformado en su gran mayoría por jóvenes, que tienen otro lenguaje y otros intereses distintos a los caudillos veteranos tanto en edad como en ideas. También existen otros retos que recién están siendo observados por algunos políticos, que son además de la gran inseguridad que experimentamos en todo el país, el modelo económico extractivista, en estos tiempos donde ya se cuestiona el sistema político-económico neoliberal, por no haber resuelto la gran desigualdad en la distribución del ingreso, la mitigación del daño ambiental y el anómalo crecimiento de nuestras ciudades. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional Blog: www.majevic.blogspot.com

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