El hombre en un cometa

El pasado 12 de Noviembre, la sonda espacial Rosseta, de la Agencia Espacial Europea, (ESA), ha cumplido satisfactoriamente su misión al aterrizar suavemente un modulo robotizado, denominado Philae, sobre una pequeña área de un lejano cometa. El nombre dado, a este robot, es en honor a una pequeña isla en el rio Nilo, que es famosa por los templos hechos en tiempo de los faraones. Es que esta proeza espacial de posar este robot en un pequeño cuerpo celeste de solo 25Km cúbicos de volumen se asemejan a las dimensiones reducidas de esta celebre isla. Esta sonda espacial ha viajado más de 500 millones de kilómetros en un lapso de 10 años para llegar al cometa 67P/Churyamov-Gerasimenko. Esta distancia es 3 veces mayor que la que nos separa del Sol. Todo el mundo está impresionado por este logro tecnológico, porque su éxito demuestra la capacidad de los científicos, ingenieros y técnicos que han laborado en este proyecto. Este ingenio ha tenido que aterrizar a una velocidad de un metro por segundo, con la misma velocidad que todos nosotros empleamos al caminar. Pero el objeto cósmico viaja a 55 mil kilómetros por hora. Esto demuestra la compleja tarea de automatización y control, que han tenido que utilizar para cumplir este reto en forma eficiente. La importancia de esta misión es obtener información sobre el origen de nuestro sistema solar y también del origen del agua. Este liquido elemento que todos usamos diariamente tiene una serie de misterios por desentrañar. Este ingenio hará el mismo trabajo que efectúa en Marte muchos vehículos que se han posado en este planeta como es el robot Curiosity. Según los estudios sobre el origen de nuestro sistema solar, que se formo hace 4500 millones de años, parte del material remanente tanto del Sol como de los planetas que conforman este sistema, se encuentra en los cometas. La conformación de los planetas actualmente esta modificada por las transformaciones que han experimentado a lo largo de su evolución, pero los cometas no han sufrido este tipo de transformaciones y por este motivo conservan el material original que intervino en la formación de todos los planetas y de nuestro Sol. Por esta razón los cometas son verdaderas reliquias cósmicas. Los cometas son cuerpos celestes, conformados por hielo, polvo cósmico y rocas, que orbitan alrededor del Sol. Estos cuerpos juntos con los planetas, asteroides y satélites, forman parte de nuestro sistema planetario. Uno de los cometas más populares es el denominado Halley que nos visita cada 76 años. Pero muchas personas creen que es suficiente observar a los cometas con el telescopio espacial Hubble, pero a pesar de su gran resolución sus imágenes no son tan nítidas como se pensaba antes de que la sonda Rosseta se aproximara a este cometa. Las primeras imágenes de esta sonda son mejores que las que nos pueden ofrecer este telescopio. Los cometas no son iguales, pero los hombres de ciencia hacen una serie de hipótesis que luego tienen que ser contrastadas con la realidad. Esto conlleva a realizar nuevas preguntas y de esta forma se consigue desarrollar las ciencias cósmicas. Actualmente se sabe muy poco acerca de los cometas, pero esta nave ayudara a conocerlos más. Según muchos científicos, cada día que pase esta sonda nos dará una sorpresa por los múltiples conocimientos que se obtendrán de sus análisis y pruebas. A medida que este cometa se vaya acercando al Sol, se podrá verificar como cambia este cuerpo celeste. Es como tener un cometa en la plaza mayor de Trujillo, al que podríamos observar permanentemente. Lamentablemente la lejanía de este cometa solo permitirá, que este robot envíe información a la Tierra por dos meses porque sus baterías y celdas solares, no están en capacidad de funcionar más tiempo, siempre y cuando no los cubra el polvo o se calienten demasiado a medida que se acerca al Sol. El Philae, para poder aterrizar en este cometa, lleva arpones y otros dispositivos que le han permitido atornillarse en el pequeño espacio escogido para esta operación en el errante cometa. Es decir todo un complejo sistema para que la misión se realice con éxito. El lugar exacto para posar este modulo, fue decidido hace dos meses, después que Rosseta, alcanzara al cometa y comenzara a orbitar a su alrededor. Esto les permitió determinar la zona en el cometa para que el Philae se posara adecuadamente. Esta proeza, es solo comparable con el viaje de la misión Apolo 11, que llevo a Neil Armstrong, Edwin Aldrin y Michael Collins a nuestro satélite natural, el 16 de Julio de 1969. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional Blog: www.majevic.blogspot.com .