domingo, 6 de octubre de 2013

La amenaza contra el Planeta

Estamos atravesando un periodo de una real amenaza sobre la Tierra debido al Cambio Climático provocado por el consumismo y la explotación irracional de hidrocarburos, minerales, la deforestación de bosques y la contaminación de aguas marítimas y de los ríos. Parece que la codicia, la ambición sin límites nos ha enceguecido, sobre todo a los políticos y hombres de empresa, que no reparan un momento en tomar decisiones sobre un evento, como el calentamiento global, que está comprobado científicamente, es producto del mal uso que hemos hecho de los recursos de nuestro planeta. Los científicos del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (PICC), recientemente han publicado esta grave denuncia. Es como si a una persona que padece cáncer y se le prohíbe comer carne, porque la va a matar, ¿Seria racional que comiera carne después de saber sus consecuencias fatales? Por supuesto que no lo haría. Estamos a nivel planetario antes esta disyuntiva si seguimos explotando los recursos no renovables de nuestro planeta y producimos con ellos muchos bienes o gastamos mucha energía nuestra especie morirá. La respuesta salta en el acto. No consumir ni explotar los recursos de la Tierra para evitar nuestra desaparición. Hacer lo contrario es exponer a nuestra especie a la desaparición. Esto es difícil digerir porque existen muchos y grandes intereses en juego. Lamentablemente la codicia y la ambición no son buenas consejeras. Dicen los orientales que cuando estos malos hábitos nos dominan nos volvemos locos y no pensamos en las consecuencias fatales a las que nos arrastran. Además el periodista británico George Monbiot, en un reciente artículo publicado en The Guardian, dice que los científicos del ambiente, casi no pueden revelar sus aterradoras conclusiones sobre el calentamiento global. Es decir están prohibidos de hacerlo. En su lugar lo hacen los voceros de los gobiernos, que distorsionan la realidad de acuerdo con los intereses económicos y políticos imperantes en la actualidad en casi todos los países del mundo. Sin embargo y gracias a las redes sociales se filtran una serie de informaciones sobre el calentamiento global, que remecen muchas conciencias. Por ejemplo ante la grave amenaza que se cierne sobre el planeta por el calentamiento global, un destacado meteorólogo norteamericano Eric Holthaus, con una soberbia claridad y franqueza ha declarado que reducirá de modo muy profundo su huella de carbono (carbón footprint), que es la cantidad de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono, que la actividad de una persona produce en un determinado periodo de tiempo, y por esta razón, no viajara mas en avión. Este especialista en un reciente artículo, a la luz del informe del PICC, compara dos escenarios: Lo que pasaría si se reduce significativamente la emisión de gases de efecto invernadero y lo que acontecería si todo sigue como hasta ahora. En este escenario, los resultados son catastróficos, porque habría una fuerte alza de la temperatura mundial y el aumento significativo del nivel de todos los mares del planeta, con desaparición de una serie de islas y ciudades costeras, también habría grandes sequias en zonas que antes eran húmedas y con lluvias torrenciales en otras regiones que eran secas. Es decir habría unas nuevas condiciones climáticas, que modificaran de modo drástico e irreversible, e nuestro mundo tal como lo conocemos actualmente. Es decir esta es una conclusión aterradora, por decir lo menos. Sólo reduciendo drásticamente y de manera inmediata las emisiones de gases de invernadero se podrá evitar superar el calentamiento global de 2 grados centígrados promedio, que es considerado como el punto de no retorno en este fenómeno potencialmente catastrófico. Holthaus, así, ha tomado importantes decisiones ante este escenario, que si bien individualmente son de impacto reducido marcan un camino a seguir a escala mayor. Él reducirá desde ya su huella de carbono y por ello dejará de viajar en avión para siempre, no ira de compras a los Malls, no consumirá ningún tipo de carne, sobre todo las rojas, no tendrá auto para su uso personal y evitara usar bolsas de plástico. Es una decisión personal que a él le ha pesado pero fue lo que le dictó su conciencia. Pero si bien este ejemplo es loable es hora de que los políticos actúen porque es como si enfrentáramos una amenaza nuclear inminente. Nuestros políticos y toda la sociedad planetaria tendrían que actuar para evitar nuestra desaparición. Todavía está en nuestras manos evitar la alteración catastrófica del clima global, pero no hay tiempo que perder. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional Blog: www.majevic.blogspot.com

No hay comentarios: