El atraso de la política

Los graves problemas humanos, economicos, ecologicos, que enfrentamos, no hallan una adecuada solucion entre las personas que gobiernan el país. Los conflictos actuales, tales como la protección del medio ambiente, la creciente población joven sin futuro,la vejez desvalida, la infelicidad, la ansiedad, la angustia y la soledad producto del egoísmo social, no se tocan o se apela a la represión, al olvido y a la intimidación de los que protestan por su forma diferente de vida y su modo original de ver el mundo. En esto hay un gran componente de resistencia al cambio. Nuevos problemas quieren solucionarse con viejas recetas, que han demostrado su ineficacia. No hay creatividad ni un liderazgo visionario. Por eso muchos políticos, tal como el presidente uruguayo José Mujica, cree que los esquemas políticos se han anquilosado y por eso hay los desajustes y choques sociales que son una constante en el devenir de los pueblos. En suma la política se encuentra a la retaguardia de lo que requiere esta nueva época. En el terreno económico, se ve claramente que los políticos, sobretodo en Europa y los Estados Unidos, quieren solucionar sus graves crisis con ajustes, recortes y austeridad. Pero estas aparentes soluciones, que se aplican desde el siglo pasado, no son la respuesta eficaz y solo están produciendo mas crisis, pobreza y agitación social. Otro grave problema es la contaminación ambiental, que está comprobada científicamente y es producto de la voracidad del hombre por sobre consumir los bienes de la tierra. Ningún país, hasta le fecha enfrenta políticamente este problema, pues está en juego muchos intereses que se verían afectados si se cambia el modelo económico basado en el excesivo consumo. En nuestro país, pasa lo mismo. El deshielo de nuestros nevados, es un grave problema ambiental, pero solo sirve para ser noticia de un día. No hay políticas de estado para tratar esta anormalidad glacial producida por el calentamiento climatico. En nuestro mar, tenemos todavia una gran biomasa hidrobiologica, que cada día disminuye, porque existe sobrepesca y el estado no ejerce el control debido sobre este valioso recurso. No es posible que la mayor parte de la pesca, sirva para producir harina de pescado que se exporta para alimentar a los animales de granjas europeas, americanas o asiáticas. Este recurso marítimo, solo debería servir para consumo humano. Nuestra población, requiere de proteínas, que se pueden extraer del mar. No hay que olvidar que la tuberculosis ha regresado con fuerza y esta es una enfermedad social, que es producto de la pobreza y la mala alimentación. Además el modelo económico en vigencia, produce grandes desigualdades sociales donde un pequeño porcentaje de la población tiene la mayor cantidad de riqueza mientras la gran mayoría de la poblacion es pobre. Otro problema que parece esta fuera del ámbito político, es la crisis de valores que campea en nuestra sociedad. La honradez, la honestidad, la puntualidad, la solidaridad, la justicia, casi no se practican ni se enseñan. Ahora vivimos en un mundo sin estos valores. Por ejemplo los buenos modales, la atención, la ponderación,la prudencia, la serenidad, la lealtad estan relegadas en el olvido. Por eso hay graves desajustes sociales donde la violencia, los crimenes y la corrupción priman en todos los estamentos de nuestra sociedad. Muchos psicólogos se plantean la pregunta si el ser humano nace bueno o malo. Pero creemos que gran parte de este dilema se puede resolver con una educación centrada en valores y que se inicie en el hogar. Los entornos familiares, son el sustrato fundamental donde se debe construir los valores de una sociedad libre donde impere la justicia, la solidaridad y la honestidad. Con esta visión política, nuestro país realmente crecerá, pues no solo se trata de mayores índices de crecimiento económico sino de que estos parámetros estén acompañados por un crecimiento moral, para erradicar de todos los medios, los graves males que existen entre nosotros y que nos afectan. Se trata en suma de vencer la infelicidad, la soledad, el egoismo y la contaminación de nuestro ambiente, porque esto es parte de una buena calidad de vida. Lo económico, es el hardware de una sociedad pero los valores morales son el software social, muy necesario para la armonía de todo el tejido colectivo. Sin estos dos aspectos es muy difícil que una sociedad progrese y se eleva como una estructura humana. Para esto se requiere de nuevas políticas que esten a la altura de estos retos. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional Blog: www.majevic.blospot.com