Celendín en su 148 Aniversario

Un 30 de Setiembre de l862, el entonces presidente del Perú, Don Ramón Castilla y Marquezado, promulgo la ley que elevaba a categoría de provincia a Celendín. Este fue un justo reconocimiento histórico a un pueblo pujante, que dio al país hombres notables, como por ejemplo el Coronel Juan Basilio Cortegana, prócer de nuestra independencia y gran historiador del Perú. Celendín, antes de ser provincia, tuvo su fundación formal, a fines del siglo XVIII, por iniciativa del obispo de Trujillo Baltazar Jaime Martínez de Compañón. Este celebre obispo, en homenaje a la reina de España, le dio el nombre de Villa Amalia de Celendín. El entonces virrey Marques de Aviles, la llamo Bella Villa Amalia de Celendín, en atención a la hidalgia de sus habitantes y a la gran regularidad de su trazo urbanístico, hecho por el ingeniero español Jose Comesana. Pero el significado, que encierra la ley de 1862, es la confirmación de la importancia de Celendín, como una región de gran potencial turístico, social, artesanal, asi como de una importancia estrategia para toda la parte norte del país. Es que Celendín, se encuentra muy próximo a uno de los ríos más importantes del Perú, como es el Marañón. Esta ubicación convierte a este bello pueblo en el puerto natural, para acceder al oriente norperuano. El pueblo trabajador de Celendin, ha convertido a la paja toquilla, en una serie de obras artesanales, cuya mas significativa muestra son los famosos sombreros de paja. Estos sombreros, que ya tienen prestigio internacional, son usados por casi todos los chalanes del país, cuando cabalga n los no menos famosos caballos de paso peruano. También, estos sombreros, fueron la admiración de toda la corte inglesa, cuando el rey Jorge V, lucio un hermoso sombrero celendino, en el famoso derby de Epcot. Este bello sombrero fue un obsequio hecho por el magnate y filántropo celendino Don Augusto G. Gil Velásquez. También, el bello Celendín, cuenta con un inmejorable clima, un límpido cielo azul y paisajes que impresionan por su magnificencia a todos los que visitan esta provincia cajamarquina. Además, su pueblo es famoso por su gran laboriosidad, hospitalidad y la belleza sin par de sus mujeres. En Trujillo, la numerosa colonia celendina, se apresta a celebrar este nuevo aniversario, con un nutrido programa cívico y cultural, que tienen a unir aun mas los lazos amicales y el recuerdo siempre a flor de piel, por el terruño. Este programa es organizado por la Asociación de Residentes Celendinos en Trujillo, ACRET, que se efectuará en su local institucional a partir del próximo 8 de Octubre. Que sirva esta efemérides, también, para elevar nuestra voz a las autoridades políticas respectivas, para que se complete de una vez por todas, el asfaltado de la carretera que une Celendin con Cajamarca. Este asfaltado debe llegar por lo menos hasta Balsas, que se encuentra ubicado a las orillas del rio Marañón. Esta obra, que está siendo postergada, a pesar que existen los recursos económicos y técnicos necesarios, seria una buena acción, para facilitar el acceso a los bellos parajes celendinos. Es decir que con una buena carretera asfaltada, se reduciría significativamente el tiempo de transporte y también la seguridad y la comodidad durante el viaje. Otro aspecto que se debe sugerir a las autoridades, está relacionado con la conservación de lo que queda del centro histórico de Celendín. No hay que olvidar, que la belleza urbanística tradicional de nuestro pueblo, debe ser una ventaja comparativa con respecto a otros lugares. Es este contexto, el Cusco, es una buena referencia de originalidad porque se ha conservado en lo posible, su legado histórico.