jueves, 28 de enero de 2016

Solos en el Universo

En las últimas décadas, los astrofísicos de diferentes instituciones mundiales, han descubierto una gran cantidad de exoplanetas en sistemas planetarios, con características muy similares a los astros que nos acompañan en nuestro sistema solar. Muchos de estos cuerpos celestes tienen características similares a la Tierra, en lo referente a su constitución, dimensiones, distancia a su estrella y otros parámetros. Estos descubrimientos han sido interpretados por hombres de ciencia como una señal de la existencia de seres alienígenas, con mayor o menor grado de desarrollo científico y tecnológico en comparación a lo que han desarrollado los seres humanos hasta la fecha. Inclusive antes de estos descubrimientos, se suponía que el planeta Marte, vecino de la Tierra, existía una gran civilización de “marcianos” con una superioridad intelectual y científica que estaba próxima a invadir nuestro planeta, con el fin de esclavizarnos y extinguirnos. Esta conjetura, fue un gran incentivo para que diferentes científicos pero sobre todo escritores de ciencia ficción, como H.G. Wells, plantearan la posibilidad de la existencia de marcianos. Fue Wells, quien escribió la obra titulada “La guerra de los mundos”, donde los marcianos casi dominan la tierra y el actor norteamericano Orson Welles, propalo por la radio a fines de los años 30 esta novela, causando verdadero pánico en gran parte de la población de este país. En la actualidad, hay muchos científicos como el renombrado Stephen Hawking, quien pronostica, que una invasión de alienígenas dentro de cien años, podría causar la extinción de nuestra civilización, tal y como sucedió cuando los europeos conquistaron América desde el siglo XV. La invasión europea fue atroz para los pueblos y civilizaciones de este continente, porque la presencia europea causo la gran desaparición de casi todos los habitantes de este gran continente. Sin embargo ha sido publicada una información científica sobre la probable existencia de alienígenas, hecha por la Escuela de Investigación de Ciencias de la Tierra de una universidad australiana. Esta investigación, tenía como finalidad, entender como se ha desarrollado la vida en nuestro planeta. Este estudio dio como resultado que la aparición de la vida en sus inicios es sumamente frágil, por lo que si existió en otros planetas, terminaron por extinguirse debido a los procesos de calentamiento o enfriamiento en dichos planetas. Según el jefe de este grupo de investigación australiana, Aditya Chopra, el cosmos esta probablemente repleto de planetas habitables, por lo que muchos científicos creen que deberían estar poblados por alienígenas. Pero la gran restricción es que la vida es muy frágil en sus años iniciales, por lo que es improbable que evolucione lo suficientemente rápido para sobrevivir, tal y como sucedió en nuestro planeta. Es que la mayoría de los ámbitos planetarios es muy frágil en sus inicios y por eso no pueden sobrevivir. Estos ambientes planetarias incipientes son inestables, porque para producir un planeta habitable, todas las formas de vida, necesitan balancear el efecto invernadero, especialmente el agua y al dióxido de carbono, con la finalidad de mantener estables las temperaturas de la superficie planetaria. Probablemente hace 4 mil millones de años, tanto la Tierra como Venus y Marte, podrían haber sido habitables, pero en los mil millones de años siguientes, Venus se convirtió en un invernadero y Marte, paso a ser un congelador. Solo quedo nuestro planeta azul, con vida a raudales. Este descubrimiento parece demostrar que no existe vida en otros astros del Universo. Estamos solos deambulando por el cosmos sin la menor posibilidad de encontrar vida en otros planetas. Estas afirmaciones científicas sobre la vida, nos deben impulsar a conservar de la mejor forma a todos los seres vivos que aloja la Tierra. El hombre no puede ser el causante de que la vida desaparezca por completo. Es decir que debe haber una gran autorregulación humana para evitar que los frágiles ecosistemas que existen en nuestro planeta no se destruyan y con ellos se acabe las diferentes formas de vida, incluyendo a toda nuestra especie. Por Manuel J. Villanueva Consultor Internacional Blog: www.majevic.blogspot.com .

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