Este blog tiene como objetivo, mostrar nuestro pensamiento sobre los diferentes asuntos de actualidad, en los campos económico, político, administrativo y ecológico. También trata de difundir algunos conocimientos científicos y tecnológicos, que tiene mucha influencia en la vida de todos.
jueves, 3 de abril de 2014
El avión misterioso
No es un titulo de alguna novela del gran escritor francés Julio Verne, sino este título viene al caso por la pérdida del Boeing 777 de Malaysia Airlines, con 239 pasajeros hace más de un mes. En otros accidentes de esta magnitud, los encargados de la ubicación de un avión siniestrado, con todos los auxilios de la tecnología, lo ubicaban en menos de 24 horas, pero ahora a pesar de todas las tecnologías de punta disponible, no se halla aun los restos de este fatídico avión. En su búsqueda participan más de 20 países incluidos los Estados Unidos, China y Australia. Todas las misiones de búsqueda utilizando la detección electrónica y el uso de aviones especializados en estas misiones así como barcos, con personal especializado, no han dado con los restos de esta maquina aérea. Esto es una demostración de nuestros límites humanos y tecnológicos que todavía tenemos. Muchos expertos dicen que más conocemos la morfología de la Luna, que la geografía de nuestro planeta, para dar alguna explicación de la infructuosa búsqueda. Dan a entender que esta puede ser la causa de la imposibilidad de ubicar este Boeing. Es que nuestro planeta es el gran desconocido para nuestros estudiosos porque no se invierte suficiente cantidad de dinero en ciencia y tecnología de la Tierra. Ya se venció el plazo de obtener información de la caja negra de este avión inubicable. La casi infalible caja negra esta inoperativa porque sus baterías solo duran como máximo un mes. Esto es algo paradójico en este siglo XXI donde impera la comunicación global. Los satélites geoestacionarios de telecomunicaciones, la Internet y otros medios han sido incapaces de arrojar luces sobre la ubicación de este Boeing. No hay ningún dato digital, ni un simple llamado de emergencia, ni existe algún mensaje vía teléfonos celulares de los pasajeros o tripulantes de este avión, que pueda servir de traza para ubicarlo. Esto es una verdadera llamada de atención para los que creen que la tecnología moderna lo puede todo. Pero nadie quiere observar que esta misma tecnología no puede resolver los graves problemas que la humanidad afronta en muchos campos, como el cuidado del medio ambiente, por ejemplo. Pero toda esta parafernalia tecnológica en forma palmaria, solo sirve para incomunicarnos entre seres humanos, porque la mayoría de personas sobre todo jóvenes, están concentrados en sus artilugios electrónicos, que ya se ha convertido en una verdadera calamidad mundial. En estos tiempos donde prácticamente no existen secretos, porque el alcance de las telecomunicaciones permiten espiar a todo el mundo este donde este, parece inconcebible que los organismos competentes no puedan con dar la ubicación del referido avión. Por ejemplo la tecnología de las telecomunicaciones que muchas agencias de espionaje de los grandes países usan para saber lo que dicen y hacen sus rivales con una precisión asombrosa, ha tocado fondo en esta ubicación referido. Quizás todos pensábamos que la tecnología de las telecomunicaciones son todopoderosas, porque su gran aplicación en muchos campos son realmente dignos de resaltar. Por ejemplo en el campo de la publicidad en la red de redes, todas las empresas promocionan sus productos y conocen con mucha precisión los gustos de los consumidores. La propagando solo sirve para reforzar su fuerza de ventas a través de Internet. Es decir es un negocio redondo para las grandes empresas que se dedican a la producción y comercialización de productos de consumo masivo. Mientras pasan los días y no se sabe casi nada de este avión, surgen una serie de conjeturas pseudocientíficas para explicar este accidente. Dentro de esta óptica muchos creen que el avión ha sido atraído por alguna nave extraterrestre o que algún agujero marino lo ha tragado. Es decir estamos nuevamente como en tiempos de las cavernas. En esas remotas épocas, nuestros antepasados explicaban muchos fenómenos naturales con conjeturas y dando a los elementos el rango de dioses. Por eso el fuego, la tierra, el viento y al agua, llegaron a considerarse dioses a los que se les rendía culto para invocar su protección o sus dones. Este lamentable hecho pone a prueba nuestro conocimiento. El hombre ha descubierto una gran cantidad de misterios de la Naturaleza, estamos explorando el Cosmos con mucha precisión, lo mismo que las su partículas atómicas. Sabemos también con mucha certeza el origen del Universo, pero esta falla nos devuelve a explicaciones basadas en la superstición y la conjetura. Eso es lo que producen los misterios como es el caso del inubicable avión.
Por Manuel J. Villanueva
Consultor Internacional
Blog: www.majevic.blogspot.com
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario